

La Fiesta Patronal en honor de la Virgen del Carmen, congregó hoy a cientos de vecinos de todas las edades, que participaron primeramente de la Misa en el Templo, luego de una procesión diferente y novedosa que tuvo como protagonistas principales a los niños de Catequesis y sus familias, y finalmente el chocolate de la Virgen con tortas, compartido dentro y fuera del lugar de oración.
“Estamos dando gracias a Dios por intermedio de la Virgen del Carmen, que es la testigo fiel de la historia de este pueblo”, dijo Mena en su Homilía.
Resaltó luego que “contar la historia de Lobos sin la presencia de María sería erróneo, porque desde los comienzos ella estuvo, y con ella Jesús, y con ella la Iglesia, con sus luces y sus sombras”.
“El compromiso hoy es que, si queremos que se siga anunciando la noticia de que Dios está entre nosotros, la responsabilidad es nuestra. Hoy hay muchos hermanos y hermanas nuestras que lo buscan”, dijo más adelante.
“Un gran desafío es descubrir a Dios en lo cotidiano. Y hoy me alegro mucho de que estén acompañando esta fiesta los chicos de Catequesis, del Colegio, del Grupo Juvenil, porque tienen que ser ellos los que un día transmitan el amor a esta Madre y a su hijo Jesucristo”, añadió.