El municipio comenzó un ambicioso plan de escurrimientos pluviales en el camino de Apella, entre la Ruta 205 y Antonio Carboni.
La inversión prevista para todos los trabajos ronda casi el millón de pesos.
“Lo que estamos haciendo es profundizar las cunetas sobre ambas márgenes del camino, para que el agua escurra hacia Las Garzas y no quede estancada sobre el mismo camino, como ocurre hace años”, dijo el Secretario Guillermo Galazzi.
“La obra tiene un doble propósito. Hacer sustentable el camino y sacar además toda el agua que eventualmente se puede llegar a juntar en Carboni”, agregó Cristian Martínez, colaborador del área.
“Aproximadamente son cerca de 15 kilómetros de zanjeo y hoy llevamos hecho casi un tercio. Empezamos cerca de la 205 y en 4,5 ó 5 kilómetros más estamos llegando a la altura de La Criolla, que es donde está previsto finalizar”, precisó el propio Martínez.
Entubado con aporte de vecinos
Añadió Galazzi que la importante obra incluye también la reposición y colocación de tubos en muchos campos.
“Esta obra la estamos haciendo con aporte de los vecinos. Ellos ponen el material y el municipio realiza el trabajo”, indicó. “Por suerte los vecinos están muy contentos con la obra. Era muy necesaria”, expresó Martínez.
“Según nos dicen, hace más de 50 años que no se hacía un trabajo igual en esa zona”, afirmó.
“Además no sólo estamos zanjeando o profundizando. Estamos haciendo las cosas realmente bien, a conciencia, como deben hacerse”, remarcó.
Lo que falta de zanjeo, dijo finalmente el Secretario Galazzi, podría demandar entre 45 y 60 días más aproximadamente.