El Director de Inspección General, Dr. Leandro Banegas, recibió a padres de colegios secundarios por la organización de festejos estudiantiles previstos para fin de año.
“Queremos ir trabajando con tiempo, para evitar cualquier tipo de inconvenientes”, explicó el funcionario.
“Incluso hubo padres que vinieron a hablar al municipio, preocupados por el tema”, afirmó.
Al respecto, precisó, “el problema pasa por el lugar y por las condiciones de seguridad”.
“Como dije a los padres, acá nadie está buscando que las fiestas no se hagan. Lo que sí pretendemos es consensuar que se hagan en lugares seguros y habilitados para tal fin”, explicó.
“Por ejemplo, dijo Banegas, no en cualquier salón o cualquier quinta”.
Exceso de alcohol y falta de seguridad
Los bailes estudiantiles de fin de año, organizados por cursos de 5to. para despedir a los de 6to., crecieron mucho en el último tiempo.
Cada vez participan más chicos y el objetivo es que cada fiesta resulte mejor que la anterior.
Incluso hasta ha comenzado a generarse cierta competencia entre colegios, para ver quién organiza la mejor fiesta.
Por supuesto el principal problema es la falta de control. En los últimos años hubo casos en los que la cantidad de alcohol que se consumió sobrepasó todo tipo de límites.
“Por tal motivo, aclaró el Dr. Banegas, el propósito no es suspender los festejos, pero sí que se hagan en forma controlada”.
Lo que se acordó tras la primera reunión
Al respecto, dijo el funcionario municipal, “lo que acordamos es que antes de firmar cualquier contrato de alquiler, traigan a la municipalidad el lugar donde piensan realizar la fiesta para ver si está en condiciones o no”.
“Lo que queremos, explicó, es evitar inconvenientes y que terminen alquilando un lugar donde después no puedan realizar el festejo”.
“De hecho ya nos trajeron posibles lugares, donde claramente no es posible hacer fiestas”, advirtió.
“El lugar, insistió Banegas, tiene que ser un lugar acorde a las características del evento, con capacidad para la cantidad de chicos que piensen concurrir y con las medidas de seguridad adecuadas para tal caso, como personal de vigilancia o enfermería”.
“Hay que acostumbrarse a que no todo es lo mismo”
Dijo el funcionario que “entiendo que hay veces que por ahorrar dinero, se buscan determinados lugares”.
“Pero hay que acostumbrarse a que no todo es lo mismo. Primero está la seguridad de los chicos, luego lo económico”, advirtió.
“No podemos permitir que los festejos se realicen en cualquier lugar, si no reúnen las condiciones para que se hagan”, insistió.
“No es cierto que haya un solo lugar habilitado para hacer las fiestas”
En la reunión que Banegas mantuvo con padres, hubo quienes cuestionaron los límites puestos por el municipio y advirtieron que lo que se favorece así es que los únicos sitios habilitados aumenten los precios de alquiler.
“En primer lugar, como dije, a mí lo que me interesa es la seguridad de los chicos. Yo no voy a permitir que se hagan fiestas en lugares donde puede llegar a pasar cualquier inconveniente, por el simple hecho de que sean lugares más económicos”, expresó Banegas.
“Pero además los lugares en condiciones no son pocos. Hay varias opciones. Incluso pueden proponer otras, que no tenemos problemas en analizar”, aseveró.
“Como son eventos excepcionales y privados, no es necesario que reúnan los mismos requisitos que rigen para organizar bailes todas las semanas. Hay clubes y salones que perfectamente se pueden llegar a usar”, anticipó.
De todos modos, advirtió Banegas, “lo económico no puede estar por encima de la seguridad de los chicos”. “También eso hay que tenerlo en cuenta”, reclamó.