

El Colegio de Farmacéuticos de Lobos presentó un proyecto en el deliberativo local, con el propósito de regular y poner límites a la instalación de nuevas farmacias.
En caso de ser aprobado, “sólo podrá emplazarse una farmacia por cada 3.000 habitantes y la distancia entre una farmacia y otra no deberá ser inferior a los 300 metros”.
“Además, establece la iniciativa, sólo podrán anunciarse públicamente con la denominación con la cual fueron habilitadas, no podrá existir más de una farmacia con igual o muy similar denominación, no se permitirá la utilización de letreros o elementos comunes, que simulen una red o cadena de farmacias o que de algún modo sugieran la existencia de “sucursales” y solo podrán emplazarse o funcionar farmacias que sean propiedad de un profesional farmacéutico; de una sociedad de responsabilidad limitada o de una sociedad colectiva integrada totalmente por profesionales farmacéuticos”.
Lo que se busca
En el proyecto, que ingresó el martes en el Concejo Deliberante, los farmacéuticos argumentan que lo que se busca así es “asegurar la atención y calidad del servicio que brindan, en procura de posibilitar el acceso al medicamento de manera equitativa y racional”.
“Además, agregan, como el medicamento constituye un derecho a la salud, su provisión no puede regularse por criterios comerciales sino profesionales por encima de cualquier interés comercial o económico”.