Primeramente se realizó una procesión dando la vuelta manzana, y luego la misa que celebró el Padre Claudio Mosca.
El sacerdote, antes de bendecir los tradicionales panes que se entregan en esta fecha, sostuvo que “la enfermedad y el dolor son caminos para acercarnos a Dios”.
Remarcó que “cuando uno está enfermo, cuando nos toca sufrir, muchas veces sentimos que Dios se ha alejado de nosotros, y bien lejos está de ser así, porque Dios está unido a nuestro dolor y hace suyo nuestro sufrimiento”.
Y también destacó la solidaridad en la persona del santo. Dijo que “San Roque fue un hombre muy adinerado, que se despojó de todo para seguir el camino de Jesús, y se lo dio a quienes más lo necesitaban, a tal punto de quedarse sin nada, y enfermo, camino a Roma, se quedó sólo y enfermo y lo asistió un perrito llevándole el pan, el gesto de la solidaridad”.
“Por eso celebrar a San Roque nos invita a tener este gesto de ser solidario y tender la mano a aquel que lo necesita”, aseveró.