
“Qué bueno que les guste la idea y nos ayuden a difundirla”, dijo la Profesora Claudia Garrahan a LA PALABRA.
“El objetivo nuestro es que toda la comunidad conozca en qué consiste el proyecto y se pueda sumar. Incluso también queremos invitar a participar al municipio y a otras escuelas”, anticipó.
¿En qué consiste la iniciativa? Ni más ni menos que en la elaboración de jabones ecológicos a través de la recuperación, reciclado y puesta en valor del aceite de cocina usado, que habitualmente (por lo menos en la mayoría de las casas) termina en las cañerías, en el terreno del fondo o en las zanjas.
El original y novedoso producto que la Escuela Agropecuaria de Carboni, donde se está desarrollando el proyecto, sacó recientemente a la venta, es excelente para el cuidado de la piel, sirve también para lavar ropa, es mucho más económico que cualquier jabón común y, sobre todo, ayuda a cuidar el planeta.
“La idea es reutilizar el aceite vegetal que no usamos más en casa y que muchas veces termina en lugares que no son los adecuados”, explica la Prof. Claudia Garrahan.
Datos
El proyecto fue presentado por los alumnos de primer y segundo año de la Agropecuaria en la Feria de Ciencias distrital que tuvo lugar antes del receso invernal.
“Cada litro de aceite vegetal usado contamina 1000 litros de agua. Por tal motivo investigamos con los chicos qué podíamos hacer para aprovechar el aceite y evitar que contamine y surgió lo de los jabones”, detalla la docente, encargada del laboratorio de la institución.
“El fin es reutilizar elementos que son contaminantes y transformarlos en elementos biodegradables, que contribuyan a cuidar el planeta”, precisa Garrahan.
Naturales, prácticos y 100% sustentables
Los nuevos jabones ecológicos son completamente naturales, aromáticos, resultan ideales para cuidar la salud del cuerpo, también poseen propiedades relajantes y pueden usarse para lavar ropa.
El fin que se les puede brindar es amplio. Además, son muchos más baratos que cualquier jabón común.
Pero, por sobre todas las cosas, lo importante es que contribuyen a no contaminar el agua que consumimos todos los días.
Por eso en la Escuela Agropecuaria están todos comprometidos con el proyecto: directivos, docentes, alumnos y padres.
“Es un trabajo que estamos haciendo entre todos. Es fundamental que toda la comunidad se involucre y tome conciencia de la importancia de no tirar el aceite de las milanesas o las papas fritas”, destaca la Prof. Garrahan.
“Empezamos de a poco, pero hoy por suerte las casas están colaborando mucho y cada vez estamos incrementando la producción, lo que implica no sólo fabricar más jabones, sino principalmente retirar más aceite usado del medio ambiente”, explica.
Cómo se hacen y dónde se pueden conseguir
El proceso de recuperación y reciclado del aceite y fabricación de los jabones es relativamente sencillo.
Cada jabón está compuesto por aceite, esencias vegetales (principalmente aloe vera), agua y soda cáustica especial y luego de la elaboración se deja reposar por aproximadamente 30 días, que es lo que necesita para perder la corrosividad.
Por cada 2 litros de aceite usado se pueden fabricar hasta 15 jabones y se pueden conseguir en la propia escuela o por pedidos también en nuestra ciudad. Vienen envueltos en papel ecológico y con etiqueta, por lo que también es una excelente idea para regalar. o