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Etcheverry volvió a sorprender. Rompió otra vez con los moldes. Hace instantes tuvo lugar el inicio del período de Sesiones Ordinarias en el Concejo Deliberante y el Intendente Jorge Etcheverry dio un discurso histórico, de sólo 5 minutos de duración. Fue el más corto que se recuerde desde que se recuperó la democracia, en 1983.
Hizo lo que mucha gente reclama: que los políticos hablen menos y hagan más.
También tomó distancia de la política tradicional, de los embates, las chicanas y las discusiones.
Al respecto dijo: “la verdadera política, la que realmente importa, es la que le soluciona los problemas a la gente”.
Destacó por otra parte que trabajará en los próximos cuatro años para “afianzar lo que hemos hecho bien, corregir lo que hicimos mal y concretar lo que todavía falta”.
“Seguiremos priorizando la obra pública de calidad y donde hace falta, la intervención en educación, administrar en forma transparente, honesta y eficiente, y acompañar con contención social a quien lo necesita, sin importar de qué lado político estén”, aseguró.
También habló del contexto político nacional y provincial, con gobiernos de otro partido.
“Vamos a afrontar el nuevo escenario con la mayor responsabilidad. Esperamos y confiamos que lo mismo haga la Nación y la Provincia. Por todos los argentinos y principalmente por todos los lobenses”, advirtió.
“No voy a descansar un segundo para tener el Lobos que nos merecemos”, completó Jorge Etcheverry.
Todos los concejales, tras la sesión, admitieron sorpresa por lo breve del discurso. En general lo corto de su alocución cayó muy bien y recogió unánimes felicitaciones.
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