No se repara en salvar por lo menos a los niños de las declaraciones que se hacen para conseguir un título grandilocuente en los medios, que les permita sobresalir, aunque sea por la desmesura.
La semana pasada publicamos declaraciones de la candidata a consejera por el Sobrerismo, Alejandra Vera, quien dijo: “Cada vez son más los chicos que se descomponen en la escuela por hambre”.
Esta mención provocó todo tipo de críticas, ya que no se sabe si hizo una denuncia formal en los organismos educativos, o fueron sólo declaraciones periodísticas.
No dijo en qué colegio fue y, sobre todo, si hizo algo para solucionar el problema que menciona, esto es gestionar el envío, como mínimo, de una asistente social para tratar de paliar la situación.
Lo del hambre en nuestra comunidad, es sin duda un tema para un debate amplio y por supuesto con seriedad, ya que nuestra ciudad, por sus características geográficas y sociales, no debiera pasar por estas situaciones límites. Distinto es en las provincias pobres con poca densidad demográfica.
En tanto, entidades educativas dieron a conocer que los comedores escolares, desde que comenzaron las vacaciones, son utilizados sólo por el 10% de los niños.
Sí, el 90% de los chicos, según datos oficiales, no concurren a almorzar a la escuela en las vacaciones. Esto no habla precisamente de una hambruna generalizada.
También hay que decir que el gobierno provincial de Scioli, espacio del que es candidata la docente Vera, le daba a los comedores escolares sólo $ 6 por vianda, y la gobernadora Vidal duplicó esa cifra.
En ese momento no hubo de su parte o de algún kirchnerista ninguna objeción. Ahora, en campaña, parece que todo vale para seguir batiendo el parche de la espectacularidad sin importar si es verdad o no.
En el mismo sentido, hay otro acto de campaña demagógico, como se publica en página 30. El Frente de Izquierda de nuestra ciudad hace una campaña para juntar alimentos para los despedidos de Pepsico que no quisieron cobrar las indemnizaciones, que es acompañado por Unidad Ciudadana, espacio de la ex presidenta Kirchner y la docente Vera, y por SUTEBA.
La pregunta que debemos hacernos es ¿por qué si el Kirchnerismo local afirma que hay chicos que pasan hambre, no hacen una campaña para juntar alimentos para ellos, que son niños y son lobenses?
Son cosas que no tienen una respuesta lógica y que explica, como dijéramos en nuestra editorial anterior, que mientras los políticos tengan como objetivo el poder y no las necesidades de la gente, nuestra sociedad va a seguir sumergida en la decadencia.
En campaña, escuchamos las mayores incoherencias que se puedan decir. La oposición que gobernó hasta hace 5 minutos y que dejó un país devastado, ahora dice que tiene todas las soluciones.
Así de coherente es el debate. Así de trágicas las consecuencias, sobre todo para los que menos tienen.
Marcelo Blasco
Director