“Queremos alertar a los vecinos porque el parque automotor en Lobos es cuantioso y deberán extremas la precaución cuando vayan a cruzar ese paso a nivel”, remarcó Duré.
“Tomamos la determinación de no atender más esa barrera porque no están dadas las condiciones de seguridad”, dijo de manera tajante antes de explicar los hechos ocurridos en las últimas horas de la tarde del martes, que derivaron en esa medida.
Aclaró el ferroviario que “los trenes están todos avisados y deben parar antes de cruzar el paso nivel, advertir con la bocina el cruce que se hará a paso de hombre”.
Y recordó que “en el tren del Sarmiento pasan 5 formaciones de ida y vuelta a la mañana y otras cuatro o cinco a la tarde, y se les suman las formaciones que vienen de Cañuelas”.
También remarcó Duré que “el personal cambista y de la estación, atendían esa barrera desde el año 95 a modo de colaboración porque nunca TBA ni la actual empresa del gobierno tomó personal para estar las 24 horas en el lugar”.
Y advirtió que “la colaboración implica para nosotros un grave perjuicio porque ante un accidente la ART ni la ley nos cubriría”.
Relató Leonardo Duré que “estaba ingresando un tren de Merlo a las 19,30 del martes, y fue agredido el personal que va a atender la barrera, que es el cambista”.
“La barrera está rota hace dos semanas y él cubre la parte que está averiada, y al estar descalibrado el otro brazo, hay un hueco por el que personas a pie, en bicicleta o en moto pueden llegar a pasar”, amplió.
Precisó también que “en este caso eran 4 motos por calle Chacabuco, pasaron por ese hueco y al ver la intención de cruzar el muchacho quiso evitar eso y lejos de acatar la indicación de parar, se le fueron encima con el riesgo de atropellarlo”.
“El tren venía a unos 60 metros, el cambista se corrió para el lado de la vía para no ser embestido por las motos, y de casualidad no fue una tragedia”, enfatizó Duré.
“El conductor del tren logró frenar porque ya venía muy despacio por la rotura en la barrera”, concluyó.